Hurtado Arenas, PaulinaAllú Ríos, PaulinaCampos Campos, TaniaCastañeda Norambuena, CristianCurutchet Barría, DayanFigueroa Ortiz, GiannisaLeón Alfaro, Bárbara2022-12-012022-12-012009http://repositoriobibliotecas.uv.cl/handle/uvscl/7715“Primum non nocere” es una máxima de origen griego, que se le atribuye a Hipócrates y significa “ante todo no dañar”, aunque también se reconocen diferencias sutiles entre ellas: "Primero no hacer daño", "Sobre todo no hacer daño", "Primero que nada no dañar" o "Antes que nada no dañar". El mencionado adagio se relaciona fuertemente con el principio de no maleficencia y, junto al principio de beneficencia, han funcionado como eje ético durante veinticinco siglos de atención en salud, ubicándose como prioridad en la jerarquización de las obligaciones éticas del personal sanitario. Por ejemplo, según el destacado filósofo y bioético William Frankena, la no maleficencia y por ende, el “Primum non nocere”, se instaura como el mayor compromiso dentro de los principios éticos, a través de los siguientes puntos: - La obligación de no producir daño o mal. - La obligación de prevenir el daño o el mal - La obligación de remover o retirar lo que esté haciendo un daño o un mal. - La obligación de promover lo que hace bien. Bajo estas perspectivas, en mayo del 2004, la 57a asamblea mundial de la salud apoya la creación de una alianza internacional para mejorar la seguridad de los pacientes, llamada “Primer Reto Mundial por la Seguridad del Paciente”, se concretan así acciones según esta máxima, las cuales respaldan su inicio y además proponen las directrices sobre la higiene de manos y atención sanitaria.esANTISEPSIACIRUGIA GENERALEQUIPOS Y SERVICIOS HOSPITALARIOSCumplimiento de los cinco momentos de la antisepsia de manos y su relación con los factores personales del equipo de salud, en el servicio de cirugía adulto, Hospital Dr. Gustavo FrickeTesis