Examinando por Autor "Lobos Vera, Diego"
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Ítem Atrapado en las cavernas :(Universidad de Valparaíso., 2020) Sepúlveda Castillo, Marcel; Lobos Vera, Diego; Lavanderos Montero, FernandoDesde mi infancia he tenido un interés en la animación, veía series de Cartoon Network, Nickelodeon y películas de Pixar de manera adictiva, pensaba que con este medio se podían crear mundos totalmente distintos a la realidad que conocemos, como existe una completa libertad en manipular lo que pasará, desde los aspectos de los personajes, los eventos que suceden, los lugares donde se ambientan, etc. Así que desde una temprana edad me hice la idea de que quería ser un animador. Con el paso del tiempo le propuse la idea a mis padres, ellos me recomendaron que podía comenzar primero con algo similar: el cine, en ese entonces no tenía mucho interés en este, debido a que le encontraba que presentaba demasiadas limitaciones técnicas, no se podía hacer cualquier cosa que se me ocurriera, o al menos no sin un presupuesto gigantesco, más adelante me empecé a abrir a la idea, me di cuenta que no iba a rechazar completamente la animación a favor del live-action, la grabación de actores reales, sino que ambos pueden convivir, tanto en hacer obras animadas como obras que no lo estaban o incluso, combinar ambas técnicas. En ese tiempo, cuando estaba en Enseñanza Media, más o menos en 2012, arrendé un DVD en Blockbuster, que en ese tiempo estaba cerca de quebrar, pero aun así me mantenía fiel a él porque ahí es donde arrendaba mis películas animadas favoritas de mi infancia. La película que arrendé y vi era El árbol de la vida, (2011) del director estadounidense Terrence Malick, quedé completamente impresionado porque nunca antes había visto una película como esta, la narrativa convencional no parecía ser el mayor interés sino que iba de la mano con la presentación de imágenes, éstas imágenes, que eran impresionantes en lo visual, evocaban cierta realización técnica, es decir, aunque fuesen reales, no dibujadas, se sentían como pinturas, como los planos de bosques, mosaicos de iglesias, el espacio exterior, una mano de un adulto tocando el pie de un recién nacido, todo estaba realizado de una manera casi contradictoria, era realista en el sentido que eran imágenes reales, pero al mismo tiempo estaban compuestas de una manera demasiado buena para sentirse completamente naturales, lo cual no lo digo como una crítica, sino que sentí que una película live-action podía realizarse de una manera similar a una animación. Otro elemento que me llamó la atención es que de repente se empleaba el uso de animación CGI, generada por computador, para mostrar unos dinosaurios en una secuencia prehistórica, es curioso como una película que contiene un par de escenas animadas no es considerada como ‘’animada’’, eso reforzó mi idea que podía trabajar con ambos medios en mis proyectos. Obviamente el uso de CGI en una película principalmente live-action no es nada nuevo, pero usada en un contexto de cine no comercial me resultó totalmente fascinante, cómo el medio de animación puede complementar una visión artística, en vez de ser usado para crear un monstruo o un superhéroe. Ya al entrar a la carrera de cine, durante uno de los talleres de 2017, el profesor nos pidió que hiciéramos un auto-retrato, yo decidí hacer un cortometraje que hablara sobre la relación del autor con su obra, tema con el que aparentemente estoy obsesionado, como mi pitching de más adelante puede verificar, este trabajo empezaba con grabaciones de mí y de mi casa, las cuales abruptamente eran interrumpidas por secuencias animadas en Paint, en este caso las usé para mostrar lo que no podía mostrar en live-action: una escena de una persona desintegrándose en el espacio y una familia siendo borrada por un polvo rojo, la cual no se suponía que debía tomarse literalmente como alguien muriendo en el espacio, sino representaba cómo un personaje fácilmente puede ser eliminado de la trama de una película, en resumen, las partes animadas eran más abstractas y representaban ideas en vez de acciones concretas.Ítem La vida de la luz y la belleza de lo inestable(Universidad de Valparaíso., 2019) Toledo Duque, Tomás; Lobos Vera, DiegoCharli (20) un joven obsesionado con encontrar a las personas extraviadas desde la desaparición de su hermana colecciona y guarda dentro de una carpeta, los carteles de “Se Busca Persona Desaparecida” que encuentra en la calle. Catalina (28) una actriz que desarrolla una obra de teatro desaparece, sin dejar rastro, a semanas del estreno de la obra.Ítem Penumbra(Universidad de Valparaíso., 2019) Silva, Matias; Lobos Vera, Diego; Lavanderos Montero, FernandoÚltimamente he adquirido la costumbre de escribir en papeles sueltos, a modo de fragmentos, quizás, por falta de una libreta. Incluso, ahora que ya tengo una, no he abandonado la escritura fragmentaria, sobre todo cuando se trata de un proyecto, por lo que me tomó tiempo comenzar a desarrollar esta memoria en un solo documento. Cuando comencé el proyecto Penumbra tenía claro dos cosas: que fuera una película que abordara la problemática del tiempo y los recuerdos y que, por lo tanto, estuviera fragmentada. Si bien el tema principal de la película claramente son las desapariciones de personas en el sector de Playa Ancha y la búsqueda de éstas por sus familiares, lejos de todo apoyo gubernamental, en una especie de constante desolación y estado de angustia producto de la incertidumbre sobre el paradero de sus personas queridas siento que es sólo una excusa: un argumento con posibilidad de desarrollo para abordar las ideas del tiempo, los recuerdos y los fragmentos. Fue el maestro Sergio Navarro quien una vez dijo: “ Los cineastas escribimos A con el objetivo de grabar B, y lo que no entienden la mayoría de los cineastas es que escribimos A para grabar B ”. En el sentido de aquella expresión, el proceso del proyecto es similar, la escritura del argumento es la excusa para explorar aquello que está antes, entre y más allá de lo planeado, incluso en la búsqueda de este “B” he tenido que agregar secuencias que no estaban pensadas en el guion, es decir en “A”. En consecuencia, si bien el proyecto está cada vez más cerca del corte final que se escribió a inicio de año, y que responde a las intenciones y deseos presentados en el pitch, me sorprende gratamente ver diferencias destacables entre el primer borrador o maqueta audiovisual y este producto pronto a terminar. Charli es un personaje marginal que está obsesionado con encontrar a las personas que están desapareciendo desde el extravío de su hermana Catalina. En él, está materializada la idea de la angustia, consecuencia de la incertidumbre sobre el paradero de su único familiar. En su día a día el personaje se enfrenta al recuerdo y se alimenta de él, de una imagen que ya no existe más que en su memoria, de fragmentos que componen su realidad. Charli pasó meses internado en el hospital psiquiátrico de Playa Ancha por sufrir crisis maniaco-depresivas. Fue en ese período que ocurrió la desaparición de Catalina, quien iba a visitarlo a diario. Las consecuencias de enfrentarse a la realidad, luego de haber estado internado, se reflejan en su obsesión con las personas extraviadas en el sector de Playa Ancha, en el haber memorizado todas las informaciones y descripciones de sus carteles, además de guardarlos y llevarlos dentro de una carpeta con la foto de su hermana. Ahora si bien en la última edición varias de las acciones antes mencionadas no quedaron, siento algo hay de ellas aún en la atmósfera del cortometraje, ya sea a través de sus locaciones, del personaje o en su mismo discurso, existe allí una esencia de lo marginal.Ítem Penumbra(Universidad de Valparaíso., 2019) Campos Noemi, Mauricio; Lavanderos Montero, Fernando; Lobos Vera, DiegoA continuación presentaré mi memoria de título, la cuál abarca mi proceso de trabajo durante el rodaje del cortometraje de egreso que lleva como título Penumbra. Este corto contó con un equipo de cuatro alumnos en cargos principales, de los cuáles Matías Silva fue el director, Tomás Toledo el director de fotografía, Benjamín Carvajal el sonidista y finalmente yo, que estuve cubriendo el cargo de asistente de dirección. La realización de esta obra marca un hito importante en nuestro proceso universitario ya que se posiciona como el trabajo culmine de un proceso que se viene gestando desde el inicio de la carrera. Personalmente opino que la realización de la obra de egreso funciona como una buena oportunidad de cumplir aquél objetivo que todo estudiante de cine se propone: realizar una obra cinematográfica de calidad y respaldada por un arduo proceso de reflexión. Siento que como estudiante de cine uno posee una serie de expectativas de este proceso, ya sea de las capacidades personales de cada uno, las cuáles uno espera desarrollar a lo largo de la carrera y también expectativas del asesoramiento y de los conocimientos que los profesores nos impartirán para llegar a elaborar una obra de tal escala. Solo al final de este largo proceso puede uno permitirse reflexionar sobre si las expectativas fueron efectivamente satisfechas o si hay cosas que no se lograron concretar quedando a medio camino, descubriendo entonces cuáles fueron las falencias y las virtudes de nuestro trabajo. Durante esta memoria pretendo abordar estas reflexiones de la manera más sincera posible y también espero ser fiel a mi propia postura y pensamientos que he tenido a lo largo de la carrera los cuáles vienen a manifestarse en la praxis de este año universitario. Antes de entrar de lleno en el contenido de la memoria debo poner en contexto que la realización de nuestro corto de egreso se dividió en dos etapas, cada una asignada a un semestre de la carrera, en primer lugar tuvimos el proceso de preproducción donde se trabajó esencialmente el desarrollo de un guion solido y una planificación que permitiera un rodaje satisfactorio, culminando así esta etapa con el desarrollo de una escena que nos permitiera comprobar que nuestro ritmo de trabajo era lo suficientemente eficaz y nuestro equipo lo suficientemente responsable como para pasar al proceso más complicado que sería el rodaje principal y la eventual postproducción. Por lo tanto el segundo semestre se centraría de lleno en el rodaje de la obra como un todo y en finiquitar el cortometraje con todos sus detalles. Habiendo puesto en contexto la planificación oficial debo decir que el proceso de realización de Penumbra fue completamente diferente de lo esperado, ya que aprovechando el buen ritmo que mantuvimos en la etapa de preproducción, el cuál nos permitió ir al día con todos los requerimientos, pudimos acceder a los equipos de grabación anticipadamente y también realizar una gran cantidad de ensayos, como equipo se aprovechó en gran manera este tiempo para grabar una buena porción del cortometraje en la primera etapa. En otras palabras al finalizar el primer semestre ya contábamos con la mayor parte del cortometraje terminado y eso nos permitió considerar el rodaje oficial más bien como una oportunidad de mejorar en base a retomas y expandir algunos elementos que el director estimara conveniente para la historia que quería contar. Esta actitud algo rebelde a la hora de abordar la realización es en mi opinión lo que definió el rodaje de Penumbra y aquello que permitió un resultado satisfactorio a nivel personal para el equipo. Dentro de nuestro equipo de trabajo, la mayoría de nosotros teníamos la experiencia de haber roto varias reglas en el pasado para conseguir resultados que el protocolo no nos hubiera permitido lograr, por supuesto aquello siempre se trata de una apuesta bastante grande y aquella rebeldía debe abordarse con cierto grado de responsabilidad y respeto hacia lo que uno esta intentando lograr porque las consecuencias de seguir una ruta diferente puede acabar en resultados catastróficos, en el peor de los casos que el proyecto quede incompleto, pero puedo dar fe de que nuestro trabajo se realizó con responsabilidad y pasión por aquello que nosotros consideramos importante como grupo, tomamos riesgos pero nunca perdimos de vista el objetivo. A continuación presentaré varias entradas de una bitácora que inicié incluso antes de comenzar a trabajar en el proyecto, esta bitácora me acompaño a lo largo del primer semestre y fueron mis reflexiones de momento a momento. Durante el segundo semestre no llevé a cabo una bitácora, por ello solo me queda reflexionar en retrospectiva mientras recuerdo todo lo que significaron las etapas que llevamos a cabo en aquél entonces.Ítem Sobre el diseño sonoro en penumbra :(Universidad de Valparaíso., 2020) Carvajal Castillo, Benjamin; Lobos Vera, Diego; Lavanderos Montero, Fernando¿Por qué alguien en su sano juicio estudiaría cine? En segundo medio comencé a decirle a todos los que me preguntaban que iba a estudiar que yo estudiaría cine, mis motivos eran sencillos en ese momento, no tenía muchas matemáticas, era lo suficientemente interesante para comenzar una conversación, no me podían acusar de estudiar algo por la paga, el título de la carrera era corto y vago, pero por sobre todo, no había ninguna otra carrera artística que estudiar en una universidad acreditada. Hacía poco en ese momento había descubierto que disfrutaba escribir y escribí mucho, nada de lo que escribí era bueno o interesante, pero era lo único que me interesaba hacer, todas las otras carreras además de cine se escuchaban como cosas que requerían habilidades que yo no poseía y no servían para mi meta real que era ser eventualmente alguna especie de escritor. Literatura era sobre el estudio de libros no de cómo escribirlos y a pesar de que me interesaban mucho cosas como Psicología, Filosofía o Astronomía, la presión social me empujaba lejos de esas primeras dos carreras y mi total falta de entendimiento matemático me alejaba aún más de la tercera. No soy la clase de persona que hace planes, porque realmente no entiendo como funciona eso, así que impulsivamente puse cine como mi primera opción sabiendo que entrar a la carrera no sería complicado. No leí la malla curricular, no hablé con nadie que la hubiera cursado, solo me concentré en el inicio de clases y en qué días debía hacer qué trámites para postular a becas y cosas por el estilo. A pesar de que considero que he aprendido mucho durante la carrera, siento que últimamente me he empujado a mí mismo cada vez más lejos de ser cualquier clase de artista, otros alumnos culparían de esto a los ramos teóricos diciendo quizás que le quitan la diversión a la creación artística, pero jamás tuve problemas con un ramo teórico y aunque la tesis me tomó un semestre más de lo necesario para terminar, eso se debió más a motivos emocionales ajenos al taller de tesis mismo. La verdad es que lo que más hizo daño a mi motivación fueron los talleres prácticos, lentamente me di cuenta que no pertenecía a este lugar, al menos no de la forma en que pensaba que lo hacía, la carrera para mí fue una historia de lento aislamiento y creciente alienación emocional e intentaré lo mejor que pueda explicar por qué y por qué simplemente no abandoné la carrera cuan.do me di cuenta que no tenía sentido seguir adelante en esta.Ítem Trébol sobre la frente(Universidad de Valparaíso., 2020-03-04) Morgado Merchán, Andrea Lucia; Lobos Vera, DiegoEn mi experiencia como estudiante de la escuela de cine de Valparaíso, ha sido larga con alrededor de siete años estudiando. Pude realizar mi ayuda alrededor de 10 proyectos. Tres de esas como realizadora, y en unas 4 ocasiones como directora de arte. O asistente de arte y directora de foto. el trabajo en la escuela siempre fue conciso y se pudo aprender mucho de las experiencias tratadas, he aprendido bastante de mis profesores y compañeros, a la hora de mostrar un desempeño exigido, teniendo algunos aciertos más certeros que en otros casos, siempre resulto un muy fructífero trabajo en cuanto aprendizaje. El trabajo audiovisual que decidí tratar para mi titulación es un pequeño cortometraje. El video de duración de 3 minutos aproximadamente con dos fotogramas por segundo que muestra el contenido de una historia dirigida por dos personajes donde uno de ellos recibe un disparo y muere y se ve su alma y su cuerpo transitar por una especie de limbo profundo rodeado de imágenes y símbolos significativos. El personaje principal es un personaje de la vida real que falleció a comienzos del 2018. Cuya relación con él había sido significativa para mí en mi infancia. Para hacer este video fue necesario muchas recolecciones de ideas y un poco la especialización de la técnica de acuarela mojado sobre seco, es decir saber de la técnica del pintado y del acabado de algunas ilustraciones fueron sin más ni menos parte de la técnica que veremos más adelante. El proceso de esta animación fue largo. Comencé a animar a mediados de junio del 2018 y terminé de dibujar el verano del 2020, al comienzo era muy eufórico animar, me era muy familiar el sentir que tenía con la animación las cosas que sucedían para mí era como si afloraran delicadamente mil ideas al mismo tiempo y terminé en muy pocos días la animación en lo que fue su primer esqueleto. Es decir, solo los dibujos de grafito en alrededor de 150 hojas. Con el tiempo fui siendo más serena y me sentaba a pintar como pasatiempo sin saber que eran y que serían estos dibujos. Era 2018 y estaba recién reincorporándome de un percance de salud muy importante. Aquello también sumaba a mi visión de todo este territorio de la muerte y la transmutación de la vida en la zona del “limbo” aquella que quería explorar. Un recuerdo muy bello es que vino una lluvia muy necesaria esos días y yo recolecté el agua de esa lluvia en un bol grande. Allí en esa fructífera agua empecé a animar y a licuar mis colores con lo que sería un despertar a una dimensión nueva para mí, claramente ocupando dicha agua que venía de la naturaleza como elemento y herramienta para pintar y así animar bajo el stop-motion de cuadros por segundo. La animación no era muy larga, es decir no con muchas páginas apenas 214, pero repasar los dibujos fue necesario hacerlo dos manos por dibujo hasta 4 manos, y repasar con la visión de cómo tenían que ser las diapositivas y hechas las correcciones, cada cierto tiempo me ponía a hacer pinturas, pero lo cierto es que me llevo más tiempo dándole la vuelta a que forma tenia, como era, que quería, como me lo imaginaba y como me parecía más certero hacer los dibujos, que llegara la inspiración y las ganas de pintar algo tan pesado demoraba su tiempo, habían veces que pensé que no lo seguiría hasta que de pronto llegaba la inspiración y eran muchos días pintando. Lo recuerdo como estar haciendo tareas cuando niña, solo me sentaba y pintaba. Recuerdo cuando hice mi primera prueba de visualización con Diego Lobos; vimos el formato que tenía y como se vería, allí analice unas preguntas frente al sonido y como acoplarlo, pensé que la música que llevaba ese día estaría bien pero el profesor me dijo que podría correr con problemas de derecho de autor. Luego también me di cuenta que la música tenía que introducirse en los dibujos no los dibujos en la música. Así fue como quede después de un primer análisis con el cortometraje a medias; me faltaban repasar muchos planos y dibujar casi la mitad de la historia hecha, es decir más de 100 páginas y encontrarle una música, así estaba para el lunes 14 de octubre donde tenía mi primera corrección y estaba lista con todos los límites y propuestas hechas, así me quedo muchos días de trabajo y mucho trabajo también. Será como lo primeros días de febrero que comencé con los que aceres de la universidad entre esos el corto trébol sobre la frente. Que significa desear suerte al morir. Pues al fin había hecho todo esto dedicado a las personas que mueren y no hay un rumbo fijo en que pasa con estas personas y la muerte. Como es su proceso llamaba mi atención. Como podemos ayudarlos a salir de este mundo. Que trascienda su espíritu lo máximo posible en un paso elevado de luz y amor, eso era mis primeras intenciones con el cortometraje. Como no sabía exactamente que le paso a mi amigo me motive a yo misma desearle con todo el amor y el arte un mejor final, un final quizás, feliz. Algo que pudiera rescatar de mi imaginario el dolor de perderlo en un accidente. Eso lo encontraba muy triste, por eso me resultaba pesado dibujar, hacer los dibujos, es un tema que a la larga resulta lento de realizar por la propuesta y dibujos que requerir la temática de la muerte. Porque era un sentir muy personal de echo cuando lo terminé me pregunté si no había quedado lo suficientemente listo. De hecho, no puedo decir que el proceso está listo o finalizado, porque sé que le pintaré más cosas y que lo seguiré haciendo. Y con mucho gusto lo continuaría y lo terminaría nuevamente.